Más de doscientos trabajadores de un frigorífico ubicado en el partido bonaerense de Quilmes marcharon este miércoles por el sur del Gran Buenos Aires para reclamar la reapertura de las instalaciones cerradas el 17 de marzo y el pago de salarios adeudados, y las fuerzas de seguridad les impidieron llegar a Plaza de Mayo.
La marcha de los operarios del Frigorífico Penta SA –que llevaban puesto barbijos- fue la primera manifestación multitudinaria que se registra en la zona desde que entró en vigor el proceso de aislamiento social, preventivo y obligatorio el pasado 20 de marzo.
Hubo participación de militante del Partido Obrero, del Movimiento Socialista de los Trabajadores (MST) y de la CTA bonaerense, con su líder Oscar de Isasi, y de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) en solidaridad.
Los trabajadores están sin cobrar sus salarios desde hace más de un mes y con la fábrica cerrada por sus propietarios. En la planta se desempeñan laboralmente unos 240 trabajadores, entre operarios y administrativos.
En la marcha, los manifestantes denunciaron que los dueños de la planta “violaron la conciliación obligatoria” que había sido dictada por el ministerio de Trabajo de la Nación el pasado 10 de abril.
Se trata de los mismos trabajadores que fueron reprimidos por la Policía de la provincia de Buenos Aires en la puerta de la planta de producción el 9 de abril, lo que derivó en la desafectación de los agentes que participaron el operativo y dispararon balas de goma.
El 18 de marzo el Sindicato del Personal de Frigoríficos de Carnes de Capital Federal y el Gran Buenos Aires hizo una presentación ante el Ministerio de Trabajo contra la empresa Penta SA, denunciando un lockout patronal.
En la denuncia, el sector sindical aseguró que la empresa busca cambiar su razón social sin reconocer la antigüedad de sus trabajadores ni su representación gremial.
“Exigimos nuestros puestos de trabajo y el cobro de los salarios y la inmediata reapertura de la planta con todos adentro. También que el Estado garantice todos los elementos de higiene (barbijos, alcohol en gel, lavandina y jabón) y testeos para descartar posibles infectados en nuestras familias”, dijo Raúl Batista, uno de los delegados.
Los trabajadores se movilizaron desde el centro de Avellaneda por avenida Mitre hasta una de las subidas del Puente Pueyrredón, en reclamo de la reincorporación de los 240 despedidos. Tenían previsto marchar hasta Plaza de Mayo para entregar un petitorio al gobierno nacional, pero un retén de fuerzas de la Prefectura y de la Gendarmería se los impidió.
A 35 días de iniciado el conflicto laboral en el Frigorífico Penta -que conduce el empresario Ricardo Bruzzese- y después de la marcha multitudinaria en medio de la cuarentena obligatoria, se confirmó que el ministerio de Trabajo y el municipio de Quilmes citaron a las partes a una reunión para mañana en la que se buscará un punto de acuerdo.