Las imágenes de los bancos atestados de gente se repitieron en bancos de toda la provincia de Buenos Aires. Jubilados, pensionados y beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo se agolparon frente a las entidades bancarias, e incluso algunos pasaron la noche en el lugar, para poder cobrar el mes de marzo. Sin embargo, en Rauch no pasó nada de eso.
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El municipio colocó sillas en las puertas de los bancos separadas entre sí a un metro de distancia. La medida se repitió tanto en Banco Nación Argentina como en el Banco de la Provincia de Buenos Aires, y resultó todo un éxito.
De esta manera, las personas mayores pudieron esperar su turno y se respetó la distancia aconsejada para evitar el contagio del coronavirus.