En un evento de la envergadura del G20, nada es dejado al azar y mucho menos la comida. Angela Merkel, Vladimir Putin, Donald Trump y los demás mandatarios estarán pocos días en la Argentina pero les alcanzará para degustar las delicias locales.
Según LA NACION, que tuvo acceso a información sobre los menúes, el viernes los líderes de los 20 países más poderosos del mundo probarán choripán criollo (entrada), ojo de bife con agresto de tomate y papines (plato principal) y flan con dulce de leche y helado de coco (postre).
El sábado, la propuesta gastronómica seguirá siendo bien tradicional: empanadas de carne cortada a cuchillo; cordero patagónico braseado con habas, damasco y tomate; y de postre un tartín de chocolate con peras y helado de pistacho.
Para beber, por supuesto, se ofrecerá una amplia y variada carta de vinos. Uno de los objetivos que tiene la Argentina durante su presidencia del G20, es mostrar nuestra cocina tradicional al resto del mundo.
Putin, el presidente ruso, va a tener un veedor en la cocina, para que observe cómo se hace la comida del mandatario. En tanto, el francés Emmanuel Macron pidió comida vegetaria pero no se especificó para qué miembro de la comitiva de 130 personas es.