En el Día de la Madre, Guido Süller dio un móvil a Implacables, para contar cómo estaba pasando esa fecha especial. En su casa en Ingeniero Maschwitz, en el partido de Escobar, contó que últimamente estuvo padeciendo algunos problemas de salud.
Por supuesto, que la entrevista la hizo al lado de su mamá, Nélida, que en un momento aprovechó para ventilar intimidades de la convivencia con su hijo y pasarle algunas facturas.
"¿Nos llevamos bien mamá?", le preguntó Guido en un momento, a lo que Nélida contestó sin concesiones: "Casi siempre", dijo provocando la risa de todos. Y agregó: "Una dice la verdad. A veces no aguantás algunas cosas".
Y pronto comenzaron los reproches: "Él se levanta como a las 2 de la tarde y comemos a las 4. Cocina y después se va y quedo yo...", dijo la mujer. "Habíamos quedado que uno cocina y el otro lava", le retrucó Guido, quien se llevó a vivir a su mamá con él tras la la muerte de su padre y de denunciar a su hermano Marcelo, quien se hacía cargo de la mujer, por violencia doméstica.