La gobernadora de Buenos Aires, Maria Eugenia Vidal, inaugura esta tarde la paritaria con los gremios docentes estatales, a un mes del plazo fijado para el comienzo de las clases en la provincia.
El antecedente de la discusión fue el encuentro de 19 gobernadores que resolvieron el miércoles pasado aceptar la propuesta del Gobierno de Mauricio Macri, de eludir la discusión nacional que todos los años fijaba el "piso" del incremento en los sueldos de todo el país.
En esa cumbre, se sostuvo la idea de avanzar con una propuesta de ajuste anual del 18%. Y también coincidieron en reclamar a Nación una actualización en el fondo de Incentivo Docente y en la necesidad de mantener el "fondo compensador" para ayudar a las provincias que no puedan afrontar con fondos propios la suba para sus maestros.
La gobernadora bonaerense presentaría al Frente Gremial Docente (integrado por Suteba, Feb, Sadop, Uda, Amet) y a Udocba un esquema parecido al que llevó al resto de los estatales. Fue hace más de un mes y acordó cuatro ajustes trimestrales de 4,5% más una "claúsula gatillo" para mejorar ese guarismo, en caso de que la inflación sobrepase ese indicador.
Los maestros provinciales tienen su propia dinámica. Son 320 mil agentes y el pago de sus sueldos se lleva casi un tercio del presupuesto provincial. El año pasado, Vidal logró una pauta del 34,5% para todo el año y consiguió algo que no pasaba desde hacía un lustro: que las clases comenzaran en tiempo y forma.
Pero para el segundo semestre del año, la concordancia viró en tensión. Después de las vacaciones de invierno los gremios reclamaron por la reapertura de la discusión. Alegaban que la mejora se había consumido por el aumento de tarifas y precios de 2016. No consiguieron que el ministro de Educación provincial, Alejandro Finocchiaro, aceptara el pedido de revisar los números.