Carlos Lecuona nació con espina bífida y a lo largo de sus 37 años debió sortear muchos obstáculos, entre ellos, más de 40 operaciones. Con cada cirugía, "Boti", como lo conocen todos, aprendió a tomarse la vida "más como un desafío" y a dejar poco a poco la queja de lado.
Hoy Lecuona da charlas motivacionales sobre la vida a partir de sus vivencias y desde hace dos años es Director General de Discapacidad en Municipalidad de la ciudad de Salta. Sin embargo, explica a VíaPaís que el camino no fue fácil: tardó 18 años en tratar de tener una mirada positiva sobre la situación que le había tocado vivir.
"Hasta los 18 años cometí un error muy grande: me quejaba de y por todo. Perdí 18 años quejándome. Hasta que un día venía andando a caballo (lo usa casi como de psicólogo), y el animal casi me tira. Ahí me di cuenta de que tenía que hacer de los problemas desafíos, para superarlos porque la vida es realmente un desafío extraordinario", cuenta Lecuona.
El contacto con los animales, en especial con los caballos y los perros, la fe y el apoyo de su familia, fueron los principales pilares donde Carlos se apoyó para seguir adelante y lograr así tener una actitud positiva frente a la vida, "a prueba y error", como define.
"Además la situación de ver montón de gente cerca muy mal por cosas muy chiquitas me hizo darme cuenta de que no podía ser así y ahí también entendí que vine acá para algo y ese algo es demostrar que se puede ser distinto, porque nadie vino a este mundo a sufrir", dice.
Lecuona es muy tajante cuando habla de defender la vida por sobre la muerte. Por eso, está en contra del actual proyecto de ley sobre la legalización del aborto que se debate este miércoles en el Congreso. "Defiendo la postura pro vida porque la oportunidad de vivir puede generar en cualquier circunstancia una mejor sociedad. Nada que tenga a la muerte de por medio puede mejorarnos", expresa.
"Yo no estoy a favor de la vida de cualquier manera -afirma rotundamente Lecuona-. Uno tiene que poder tener la responsabilidad de decidir si quiere o no tener un hijo y eso no es matando a nadie. Eso es aprendiendo a ser responsable. Y tenemos la ventaja de que se puede enseñar a ser responsable".
En el caso aborto, Carlos explica que hay "un montón de opciones con la vida de por medio". "No puedo pensar jamás que la muerte pueda ser una opción porque la adopción es una opción, la contención es una opción, el buscar el camino para no tener chicos, es una opción", explica el Director General de Discapacidad.
Y concluye: "Decirle a aquellas personas que consideran la situación de matar a alguien que piensen primero que hay un montón de gente a la vuelta que necesita de esa vida. No es obligatorio atarse a esa vida si de verdad no es la opción, pero tampoco es necesario matarla".
