El socialista Pedro Sánchez asumió este sábado como nuevo Presidente de España, un día después de haber echado del poder al conservador Mariano Rajoy con una moción de censura en el Congreso.
Ante la Constitución pero por primera vez sin la Biblia y el crucifijo, Sánchez, un licenciado en economía de 46 años, juró su cargo ante el rey Felipe VI en el Palacio de la Zarzuela.
"Prometo por mi conciencia y honor cumplir fielmente las obligaciones del cargo de presidente del gobierno con lealtad al rey y guardar y hacer guardar la Constitución como norma fundamental del Estado", dijo Sánchez, convirtiéndose en el séptimo Jefe de Gobierno de la España democrática.
Ahora, se abocará a la tarea de designar a los miembros de su Gobierno, que tomarán sus funciones después de que la lista salga publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE) en los próximos días.
Su llegada oficial al Palacio de la Moncloa ocurre 24 horas después de que el Congreso de los Diputados aprobara la moción de censura presentada por los socialistas contra Rajoy, cuyo Partido Popular fue condenado por la justicia por múltiples casos de corrupción.
Sánchez obtuvo el apoyo de una mayoría de diputados (180 de 350) gracias una coalición heterogénea que le augura un mandato muy complicado.
Unidos en el rechazo a Rajoy, que gobernó desde 2011 pero sufrió los golpes de la multiplicación de los casos de corrupción que involucraron a su partido, lo respaldaron la izquierda radical de Podemos, los independentistas catalanes y los nacionalistas vascos.