Novak Djokovic, exnúmero uno del mundo y ganador de los cuatro "Grand Slams", se expresó luego del enojo que sufrió en el triunfo contra Bautista Agut por la tercera ronda de Roland Garros: "No estoy orgulloso, pero son cosas que pasan".
Djokovic, de 31 años, rompió su raqueta contra el piso, luego de fallar un punto en pleno partido e intentó apaciguar la situación. "A veces, las emociones te sacan lo peor de ti, o a veces lo mejor. Hay situaciones en las que gritar o lanzar la raqueta te puede ayudar a desembarazarte de la presión o puede no ayudarte en en nada. Es difícil saber cómo proceder", expresó.
Por otra parte, su rival, Bautista Agut, criticó fuertemente el gesto: "Es una pérdida de control muy grande. Creo que ningún tenista debe hacer eso en pista. Debemos ser un ejemplo para todos los niños que juegan al tenis. A Novak se le ha ido la piña un poco".
Ahora, el serbio enfrentará al español Fernando Verdasco - que eliminó sorpresivamente al bulgaro Grigor Dimitrov- en los octavos de final en su búsqueda de recuperar posiciones en el ranking ATP.