Su marido volvió a casa borracho y le exigió tener sexo. Ella decidió defenderse cortándole el pene mientras dormía.
El hecho ocurrió en Rusia. Lira Plaksina, de 47 años, fue sentenciada a cuatro años de cárcel. El juez a cargo del caso declaró culpable a Plaksina por haber lastimado a su marido mientras estaba dormido y no podía defenderse.
La mujer consideró que los cuatro años son un pena blanda para lo que hizo, de hecho durante la sentencia se reía y tiraba besos en la corte.
Los vecinos de la pareja aseguraron que ambos tenían una "relación de mucha tensión" y que sus peleas eran bastante "ruidosas y constantes".