Al menos 19 personas, diez de ellas militares, ocho civiles y un guerrillero, murieron hoy en un ataque suicida con un coche bomba contra una comisaría en el extremo sureste de Turquía, según informó el gobierno turco.
Según los medios, el Partido de los Trabajadores de Kurdistán, prohibido en Turquía, es el responsable de la explosión, pero al momento no hay reivindicación.
El coche bomba estalló contra un control de ruta al lado de una gendarmería en la provincia de Hakkari, fronteriza con Irak e Irán, según las autoridades turcas.
Según comunicó la cadena NTV, el conductor intentó lanzar la camioneta contra la comisaría, pero los militares realizaron disparos de acoso y el vehículo terminó estallando frente al edificio.