Con 33 vuelos cancelados y algunas dificultades, fuentes oficiales estimaron que después del mediodía quedarán normalizados en su totalidad los vuelos de Aerolíneas Argentinas y Austral, tras la medida de fuerza que finalizó la pasada medianoche.
El conflicto entre cinco de los seis gremios aeronáuticos y la empresa en demanda de mejoras salariales dejó un saldo de cientos de vuelos cancelados, miles de pasajeros que no pudieron volar y denuncias cruzadas entre el titular de la empresa, Mario Dell'Acqua, y los dirigentes gremiales.
Ayer, Dell'Acqua advirtió que podría radicar una "denuncia penal" contra los cinco sindicatos aeronáuticos que paralizaron los vuelos en todo el país en reclamo de un aumento salarial del 26 por ciento, al acusarlos de actuar con "saña" porque iniciaron la huelga antes de lo anunciado.
Dell'Aqua también aseguró que la protesta fue "salvaje" y que "un comandante internacional está ganando en promedio 250.000 pesos (unos 14.000 dólares) por mes", algo que fue desmentido por los gremios durante una conferencia de prensa brindada ayer por la tarde en el gremio de los pilotos.
Voceros gremiales indicaron su coincidencia con las declaraciones de ayer de Pablo Biró (secretario general de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas, APLA) quién había afirmado que anunciaron "una medida de fuerza con cinco días de anticipación y los pasajeros que llegaban a Ezeiza fueron redireccionados a compañías que tienen que ver por ejemplo, con el holding Latam", con la intención de refutar la acusación de Dell'Acqua de que se trató de un "paro salvaje".
