Las audiencias que el Gobierno mantuvo con la CGT y las negociaciones con los movimientos sociales para evitar potenciales conflictos a fin de año no fueron suficientes para desarmar un escenario que la Casa Rosada quería evitar.
Esta tarde estos dos sectores se movilizaron hacia el Congreso, y se unieron en un desafío al presidente Mauricio Macri para presionar por la sanción de la Ley de emergencia social, que ya tiene media sanción del Senado. La protesta concluyó cerca de las 17.
"Hay un 40 por ciento de trabajadores que trabajan en la informalidad. Fue uno de los peores años para los derechos de los trabajadores. No queremos planes sociales", sostuvo Daniel Menéndez, coordinador nacional de Barrios de Pie,
Por otra parte, Juan Carlos Alderete, titular de la CCC, sostuvo que "el Gobierno atiende bien pero no da respuesta. El ajuste es descargado sobre trabajadores y pobres. Estamos agobiados por la inflación, los despidos y el tarifazo. El Gobierno destruye la industria nacional".
La iniciativa, que podría ser vetada parcialmente por Mauricio Macri, prevé un aumento del 15% en la asignación Universal por Hijo y por embarazo, la creación de un millón de contratos sociales y la fijación de un salario social complementario.