Para Gabriel Batistuta, la ciudad de Florencia es sinónimo de segundo hogar. Y justamente en aquellos pagos donde "Batigol" se convirtió en ídolo por sus grandes goles en Fiorentina, fue reconocido como ciudadano ilustre y se dio el gusto de convertir tres goles en un amistoso.
A sus 47 años, el goleador argentino volvió a jugar en el Artemio Franchi y se anotó con un hat-trick en un encuentro benéfico entre Resto del Mundo e Italia con viejas glorias (ganó 12-6 Resto del Mundo).
Más temprano, durante el reconocimiento, Batistuta no aguantó la emoción y rompió en llanto ante el público presente al recibir la ciudadanía ilustre de Florencia.