"El contagio acá es muy fácil", dijo Jonathan, el dueño del geriátrico de San Martín en el que murieron cinco personas y hay casi 20 infectados de coronavirus. Sin embargo, aseguró que "la situación está controlada".
El geriátrico "El Amanecer" de Villa Lynch está siendo investigado desde abril, cuando Elsa Gómez, que estaba alojada en esa residencia, murió por coronavirus.
Para Jonathan, el contacto físico que implica el trabajo implica que el contagio sea "fácil" en ese ámbito. A pesar de todos los cuidados, dijo, "un error puede pasar en un segundo". Los residentes infectados fueron trasladados a centros de salud, mientras que los demás permanecen aislados en sus habitaciones, de las cuales el 90% tiene baño privado.
Jonathan también indicó que todos los empleados cumplen con las reglas de cambiarse el calzado al ingresar al hogar y usar camisolín y doble guante. Explicó que los empleados al entrar se cambian el calzado, se colocan el camisolín y usan doble guante.
El caso de Elsa Gómez es investigado por la Unidad Fiscal de Investigación de Delitos Cometidos en el ámbito de PAMI (UFI-PAMI).