La Organización Mundial de la Salud (OMS) elevó a nivel "muy elevado" la amenaza del coronavirus, que ya llegó a México y al África subsahariana este viernes, mientras el temor a una pandemia provocaba un hundimiento en las bolsas.
Ante la rapidez de propagación -más de 83.000 casos en más de 50 países-, la OMS instó a los países en los que todavía no se ha detectado el coronavirus a que se preparen y advirtió: asumir que uno está protegido frente al COVID-19 sería un "error fatal".
Después de Brasil, un segundo país de América Latina detectó un caso este viernes: un joven de México, a quien las autoridades consideraron como el paciente cero en el país, aunque no se sabe cómo pudo haberse contagiado.
En Nigeria, un italiano que llegó a Lagos proveniente de Milán el 25 de febrero fue hospitalizado tras dar positivo. Tiene "un estado clínico estable y no presenta síntomas inquietantes", según el ministerio de Salud de Nigeria.
Hasta ahora se habían registrado solo dos casos en África, uno en Egipto y otro en Argelia. En China, donde el virus apareció en diciembre, el número de nuevos decesos y contagios siguió bajando gracias a las medidas de cuarentena impuestas a más de 50 millones de personas.
Sin embargo, otros países se están convirtiendo en fuentes de propagación de la epidemia de COVID-19, empezando por Corea del Sur, Irán e Italia.
Fuera de China, el coronavirus ya ha infectado a más de 5.000 personas y ha causado más de 80 muertos.
"Estamos en un momento decisivo", declaró el director de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, quien subrayó que durante los últimos dos días el número diario de contagios en el mundo había sido superior al de los registrados en China.
"Ningún país debe pensar que no tendrá casos. Eso sería un error fatal, literalmente. El virus no respeta fronteras", advirtió.