El jueves pasado desapareció Jarid Cinco, una niña mexicana de seis años, y al día siguiente los vecinos de Cacahoatán encontraron su cuerpo dentro de una bolsa de basura y con signos de haber sido abusada sexualmente. Ante esta situación reaccionaron contra el acusado.
El asesinato de la menor conmocionó a todos y mientras la Justicia comenzaba a investigar el crimen, una multitud ató a un poste a Alfredo Roblero Mirand, acusado de matar y abusar de la niña, y lo prendieron fuego.
En un principio una mujer, que se identificó como tía de la niña, pidió que no hicieran "justicia por mano propia". "No se imaginan el dolor que sentimos pero con más violencia no vamos a lograr nada", se escucha decir a la mujer mientras pide que cinco personas rodeen al hombre para evitar que lo golpeen.
Pero esto no fue suficiente para las personas que estaban en el lugar ya que lo agarraron, le tiraron nafta y lo prendieron fuego gritando "ojo por ojo". El hombre murió producto de las llamas y su asesinato fue grabado por quienes estaban en el lugar.
Ahora, la Fiscalía que investiga el crímen de Jarid también hace lo mismo con respecto al homicidio del presunto femicida, según detalla el diario El Heraldo. Los linchamientos son situaciones que se están repitiendo con mayor frecuencia en México,.según un informe de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH).
