La final de la Liga de Luján entre Unión de El Jagüel y SAT terminó en un verdadero escándalo luego de que se desatara una batalla campal entre los futbolistas de ambos equipos tras una violenta infracción.
El lamentable episodio ocurrió a pocos minutos del cierre del partido cuando el Sindicato Argentino de Televisión perdía 4-1. Enojado por el resultado, el mediocampista Lucas Torres le propinó una brutal patada a un rival, que podría haber sufrido una lesión grave.
Esta acción provocó la reacción de los jugadores de Unión de El Jagüel y se desató una pelea: hubo empujones, golpes de puño y patadas.
Esta no es la primera vez que Torres se ve involucrado en un hecho de extrema violencia. Según recordó El Civismo, el mediocampista golpeó a un árbitro en 2016 cuando jugaba para Lugano. En ese entonces, el Tribunal de Disciplina de la Asociación del Fútbol Argentino lo sancionó con 24 fechas.
La anterior agresión de Lucas Torres
