Desde el Gobierno anunciaron la ruptura diplomática con la Venezuela de Nicolás Maduro. El ministro de Relaciones Exteriores, Jorge Faurie aceptó la representación como embajadora de la República Bolivariana de Venezuela a Elisa Trotta Gamus, enviada de Juan Guaidó en la Argentina.
De esta forma, la gestión de Mauricio Macri formalizó su ruptura con el gobierno de Nicolás Maduro, al que no reconoce desde que aceptó la proclamación del titular de la opositora Asamblea Nacional, como "presidente encargado" a Guaidó. A partir de ahora, la nueva embajadora tendrá plenos poderes para ejercer trámites migratorios. Aunque se desconocen que sucederá con los funcionarios locales, que poseen visas de trabajo vencidas.
La decisión tiene que ver con acuerdos realizados con el Grupo de Lima, aliado a Estados Unidos, los 15 países miembros formaron esta instancia unilateral para buscar una salida a la crisis de Venezuela. A raíz de esto el Estado buscó diferenciarse de la oposición, el candidato a presidente del Frente de Todos, Alberto Fernández había confirmado que en caso de ganar las elecciones del 27 de octubre retirará a la Argentina del Grupo de Lima, y se mantendrá "neutral" como México y Uruguay.
En contraposición, el canciller Faurie aseguró que la "neutralidad es complicada". Sin embargo, el aliado político de Fernández, el candidato diputado nacional, Sergio Massa, expresó esta semana en Nueva York que "en Venezuela hay una dictadura".
Por otro lado, el ministro de Justicia, Germán Garavano estará el próximo martes en La Haya, Países Bajos, para presentar el informe que se elaboró desde su ministerio con las denuncias de unos 40 venezolanos que residen en la Argentina.