Una adolescente que se había escapado de su casa apareció muerta y su cuerpo calcinado en San Miguel. Débora Guzmán tenía 17 años y había discutido con su papá después de que éste la encontrara teniendo sexo en su casa.
Débora era buscada desde el miércoles, y el jueves se confirmó que era ella la mujer que apareció con el 80 por ciento de su cuerpo quemado.
"Fue un horror", dijeron a la prensa los vecinos que la encontraron, en un terreno baldío del barrio Santa Brigada de San Miguel.
Su papá, un gendarme de 37 años, había presentado la denuncia el miércoles y contó que la menor se había ido de su casa después de que él le recriminara haber tenido sexo con su novio en la casa familiar.
Si bien los investigadores manejan el suicidio como hipótesis principal, los vecinos tienen otra postura. "Si te quemás en vida gritás, es desesperante. Esa chica ya estaba muerta y el fuego sólo fue para quemar evidencias, es muy lógico", dijeron.
Según la hipótesis oficial, la chica de 17 años buscó un bidón con combustible que su papá tenía guardado y se roció con el contenido. Pasó por su escuela a despedirse de sus amigas, y luego se dirigió al baldío donde se prendió fuego.
El caso está en manos de la Unidad Funcional de Instrucción 22 de Malvinas Argentinas, que caratuló el caso como "averiguación de causales de muerte".