El Gobierno nacional volvió a defender el nuevo sistema de transmisión de telegramas que se implementará en las Paso del 11 de agosto, después que tras el tercer y último ensayo realizado el sábado pasado la oposición insistió en sus críticas.
En declaraciones periodísticas, el secretario de Asuntos Políticos del Ministerio del Interior, Adrián Pérez, afirmó que el nuevo sistema es "en pos de la transparencia" y aseguró que a la medianoche del domingo 11 de agosto estará cargado el 90 por ciento de los votos.
Pérez consideró "muy exitoso" el ensayo que hizo hace tres días la empresa venezolana SmartMatic, encargada del envío de las planillas de los votos desde las escuelas hasta los centros de cómputos y aseguró: "La transmisión de los telegramas desde la escuela permitirá la fiscalización de esa transmisión por parte de los partidos, es decir que los partidos van a estar viendo cómo se transmiten los telegramas en el momento. Además de agilidad, da transparencia", destacó al respecto.
Ayer, el nuevo sistema recibió renovadas críticas desde la oposición tras el último ensayo. El apoderado del Partido Justicialista (PJ), Jorge Landau, dijo que "no me gusta hablar de fraude pero sí creo en una tergiversación de la información la noche de la elección".
Por su parte Daniel Pires, uno de los apoderados de Consenso Federal, el frente que postula a Roberto Lavagna y Juan Urtubey, dijo que "el sistema ha dejado muchas dudas sobre la discrecionalidad con que los contenidos van llegando al Correo desde las escuelas".
La novedad de este sistema de transmisión respecto de elecciones anteriores es la siguiente: mediante el sistema que aplicará SmartMatic, los telegramas con el acta de escrutinio de cada mesa pasarán por un scanner y se transmitirán vía internet hacia el centro de cómputos del Correo Argentino. Antes, esos telegramas eran llevados en camionetas.
El operativo estuvo a cargo de la Dirección Nacional Electoral, con el apoyo de Correo Argentino, y se desarrolló en once mil escuelas de todo el país, que son los establecimientos que cuentan conectividad. Otras cuatro mil escuelas usarán el viejo sistema de traslado de los telegramas.
Los representantes de los partidos políticos fueron invitados a auditar el simulacro en unas treinta escuelas. "La conectividad funcionó bien, pero tengamos en cuenta que esas treinta escuelas están ubicadas en ciudades capitales, donde se cuenta con 4G, banda ancha, etcétera", aclaró Pires, planteando dudas sobre cómo será la transmisión de datos en los establecimientos escolares de ciudades pequeñas y pueblos, donde el servicio de internet es más precario.
En charla con este medio, calificó al sistema de "vulnerable": "Cuando vos preguntás sobre el software que van a utilizar, te dicen que todavía lo están desarrollando; es decir que lo que se mostró en la prueba no es lo que finalmente se usará en las PASO. Nunca terminan de cerrar el software, que por otra parte, no está certificado", dijo.
Entre las dudas planteadas, está el manejo en la publicación de los telegramas, los que contienen el resultado de las mesas: “Se puede manipular la información; los telegramas van llegando a una cola y se difunden con discrecionalidad. No tenés la seguridad de 'telegrama que llega al Correo, telegrama que se muestra'”.
En Consenso Federal temen el “efecto político” que puede crear “la manipulación respectó a qué mesa te largo primero y así instalar un número. Te acostás con un resultado y te levantás con otro. El efecto mediático y político se produjo”, advirtió Pires.
Por su parte Landau, apoderado de Frente de Todos, que postula a los Fernández, dijo que "es todo una gran improvisación, tenemos mucho temor de que esto pueda funcionar mal. Lo grave es que todo se busca hacer entre gallos y medianoche, nunca se nos consultó ni a nosotros ni a otra fuerza política ni ONG".
"El alcance del simulacro electoral del sábado fue limitadísimo", agregó. Landau dijo que "el telegrama escaneado no va a ser el mismo que tenga el data entry en la pantalla", sino que "es una elaboración de Smartmatic", empresa que desplazó a INDRA, la encargada del escrutinio provisorio de las elecciones desde fines de los noventa.
“El Gobierno tiene temor del resultado del domingo a la noche”, opinó Landau. Desde el PJ se insistirá, mediante una presentación judicial, para que el escrutinio provisorio se realice con el sistema tradicional.
El fiscal federal con competencia electoral Jorge Di Lello consideró que “no fue afortunado hacer un cambio sobre la marcha en el sistema de transmisión de datos”, pero aclaró que “la primera gran tranquilidad que hay que plantear es que está vigente el traslado de datos desde el correo al Ministerio del Interior”, además de la posibilidad de “abrir las urnas en el escrutinio definitivo donde haya votos cuestionados”.
El escrutinio provisorio, más allá de su obvio impacto político, no tiene validez legal, sino que los números que se toman en cuenta son los surgidos del escrutinio definitivo.
Por la Corresponsalía de Buenos Aires.