El Banco Central decidió este lunes liberar el uso de unos 45.000 millones de pesos extra a lo previsto y dar lugar a que la tasa de interés de referencia pueda descender cuatro puntos y medio al 58% para atender el incremento estacional en la demanda de dinero, por el pago del medio aguinaldo y la llegada de las vacaciones de invierno.
El Comité de Política Monetaria (COPOM) del Banco Central resolvió este lunes dar precisiones adicionales acerca del funcionamiento del esquema monetario-cambiario para julio.
El BCRA cumplió en junio, por noveno mes consecutivo, su objetivo de base monetaria (BM): el promedio de la BM fue $1.341,9 mil millones, levemente inferior a la meta de $1.343,2 mil millones.
Julio, sin embargo, mostrará un incremento estacional en la demanda de circulante, producto del cobro de aguinaldos y gastos asociados al receso invernal.
Para permitir una mejor administración de las condiciones de liquidez en este período y contribuir a fortalecer la transmisión de la tasa de interés de las Letras de Liquidez (LELIQ) a la tasa que reciben los ahorristas, se resolvió reducir en 3 puntos porcentuales la exigencia de efectivo mínimo sobre depósitos a plazo fijo.
Esa reducción representa aproximadamente $ 45.000 millones, que ahora los bancos podrán poner a disposición de sus clientes, la mayoría empleados o trabajadores autónomos y empresas que afrontarán un mayor nivel de transacciones y operaciones por una cuestión estacional.
Con el fin de no relajar la política monetaria, pasado este fenómeno estacional, la meta de la base monetaria será reducida entre agosto y octubre hasta compensar totalmente el efecto monetario.
Entonces: en julio la meta de base monetaria se mantiene en $ 1.343,2 mil millones, y descenderá a partir de agosto hasta llegar a $ 1.298,2 mil millones en octubre.
Para garantizar que estos cambios no impliquen tampoco un relajamiento en las condiciones monetarias presentes, el Banco Central decidió establecer durante julio una tasa mínima para las LELIQ de 58%. Actualmente la tasa tiene un piso del 62,5%.
La entidad rectora absorberá la liquidez necesaria para evitar que la tasa de interés de referencia sea menor al 58%. Esta reducción en la tasa mínima está en línea con la reducción en la tasa de inflación que se viene registrando en los últimos meses y que, de acuerdo al Relevamiento de Expectativas de Mercado, se espera continúe para julio.
¿Qué pasará con el dólar?
El COPOM ratificó su decisión de mantener los límites de la zona de referencia cambiaria en 39,755 y 51,448 pesos por dólar, hasta el 31 de diciembre de 2019.
La política de intervención cambiaria anunciada en abril para el período abril-junio se extiende a julio. Es decir, el Central no realizará compras en el mercado de cambios y podrá realizar ventas para contrarrestar episodios de excesiva volatilidad, dentro y fuera de la zona de referencia.
El monto de pesos resultante de eventuales ventas de divisas durante julio será descontado de la meta de base monetaria.
Inflación
La tasa de inflación ha comenzado a descender en los meses de abril y mayo, y los indicadores de alta frecuencia muestran que esta tendencia se mantuvo durante junio, dijo el Banco Central en su comunicado.
No obstante, aclaró que la tasa de inflación “todavía se ubica en niveles elevados”. Desde mayo, además, se ha verificado una significativa reducción en la volatilidad cambiaria, lo cual viene realizando un aporte al enfriamiento de los precios domésticos.
El Comité de Política Monetaria consideró que el estricto control de agregados monetarios llevado adelante por la entidad “continuará guiando el proceso de desinflación en los próximos meses”.
Estas resoluciones fueron adoptadas con la aprobación unánime de los integrantes del Comité: el presidente, Guido Sandleris; el vicepresidente, Gustavo Cañonero; y la vicepresidenta segunda, Verónica Rappoport.
Asimismo, Enrique Szewach, director designado por el Directorio; y Mauro Alessandro, subgerente general de investigaciones económicas.
Por la corresponsalía de Buenos Aires.