Twitter anunció que suspende hasta nuevo aviso el proceso de verificación de cuentas. Lo que permitía era, con una tilde azul, confirmar que quien estaba publicando en esa cuenta era, en efecto, quien decía serlo, y no una cuenta falsa.
Al principio, Twitter verificaba cuentas de personas públicas y muy conocidas; luego extendió esa práctica a periodistas y, en 2016, a otros usuarios que pudieran dar pruebas de identidad y de propiedad sobre la cuenta.
Sin embargo, ayer la compañía anunció que suspendía la verificación, porque se estaba tomando como símbolo de apoyo. Es que verificó la cuenta de Twitter del supremacista blanco Jason Kessle, en Estados Unidos, lo que provocó el rechazo de buena parte de sus usuarios.