Así lo anunció hoy el gobernador Juan Manzur desde la escuela Justiniano Frías, de la capital tucumana, en el marco de una política de contención social articulada entre los Ministerios de Desarrollo Social y Educación.
Durante los 15 días que duran las vacaciones y de lunes a viernes, unas 275 escuelas de la provincia brindarán prestación alimentaria y talleres lúdicos. La iniciativa busca brindar apoyo a las familias en situación de vulnerabilidad durante los días en que los chicos no asisten a las escuelas a estudiar.
En las vacaciones de julio el Gobierno de la Provincia hace un gran esfuerzo para mantener abiertas las escuelas a lo largo y ancho de la provincia. Casi 50 mil criaturas van a seguir asistiendo a los establecimientos, que tendrán con actividades múltiples: clases de apoyo, de educación física, de música, actividades manuales y los comedores, que permanecerán brindando asistencia", explicó Manzur.
Para llevar adelante la apertura de las escuelas, el Gobierno de la Provincia invertirá $5.199.094, lo que permitirá brindar seguridad alimentaria a 40.441 niños y adultos que los requieran durante las dos semanas de vacaciones de invierno.