El Instituto Provincial de Estadísticas y Censos (Ipec) confirmó este lunes un aumento en el indicador de violencia de género en Rosario y Santa Fe. El informe sobre los datos de las dos primeras semanas de abril permite ver que subieron 25% las denuncias y otro tipo de intervenciones respecto de la primera quincena de aislamiento social, preventivo y obligatorio.
En contraste con la caída interanual del inicio de la cuarentena, el relevamiento arroja 5.000 registros de diferentes casos en un mes en ambas ciudades. Sobre ese total, 2.215 corresponden a la segunda mitad de marzo, lo que sugiere un agravamiento de la problemática tal como estimaban las funcionarias de la Secretaría de Género e Igualdad.
En Rosario la cantidad de intervenciones diarias pasó de 149 a 154, mientras que Santa Fe subió de 52 a 60. A la hora de analizar las cuatro semanas, los números en la Cuna de la Bandera casi triplican los de la capital de la provincia.
Así como las autoridades del Estado santafesino advirtieron que la estadística podía ser inferior debido a los problemas para realizar denuncias durante la cuarentena, el nuevo diagnóstico que firma el Observatorio de Seguridad Pública añade que la incorporación de nuevas vías de asistencia a las víctimas no fue suficiente. "Se ha reducido en algunos casos la presencia de personas responsables de las cargas de datos, por lo que los registros pueden impactar en los sistemas días posteriores a los hechos y modificarse a destiempo", explicaron a la hora de las conclusiones.