Una joven madre santafesina estuvo a punto de perder a su hijo recién nacido por asfixia este sábado. La historia tuvo final feliz gracias a la ayuda de dos gendarmes que reanimaron al bebé y luego la ayudaron a ir hasta el centro de salud local para recibir asistencia.
Fuentes de las fuerzas federales de seguridad informaron que el personal que intervino trabaja en la sección de Seguridad Vial de Avellaneda y respondió de inmediato cuando Milena L. fue a pedirles ayuda en Las Toscas. La muchacha les dijo que el pequeño de apenas 40 días no podía respirar, aunque afortunadamente consiguieron salvarlo.
La mujer que vive cerca del cruce de las calles 33 y 20 en la localidad del departamento General Obligado abandonó su casa y se fue con el niño al Samco acompañada por los uniformados. Una vez allí, una de las médicas de guardia atendió al nene, quien finalmente quedó fuera de peligro.
Después del preocupante episodio, Milena pudo sonreír aliviada gracias a la ayuda de los gendarmes y de Noemí Cuellar, la doctora que intervino para examinar al recién nacido, el cual aparentemente tenía una obstrucción en las vías respiratorias que puso en riesgo su vida.