Tras darse a conocer los nuevos costos de los operativos policiales para el fútbol argentino, algo no cuajó en la liga local. Son clubes chicos, algunos de pueblo, imposibilitados de reunir semejantes cifras cada fin de semana.
Un poco para oxigenar la situación, hace 15 días hubo una reunión clave en la sede de calle Juan B. Justo entre los presidentes de todas las instituciones y la cúpula policial de San Nicolás y Ramallo, pero los dos intendentes pegaron el faltazo. "Así como están las cosas, el fútbol no arranca", fue tajante Gustavo Oaukim, hoy al frente de la Liga Nicoleña.
En promedio, son alrededor de $4 mil más por partido, lo que representa un déficit de $40 mil para los clubes. "Nosotros como liga teníamos la responsabilidad de hacer dos cosas: o generábamos para cada club esos $40 mil o hacíamos el torneo más corto, con menos equipos. Finalmente, todos los clubes decidieron mantenerse y habrá actividad, tanto en el Apertura como en el Clausura", refirió a Radio Noba.
Sobre el arreglo al que se llegó, marcó la intervención de la Secretaría de Gobierno. Fue por intermedio de Agustina Gruffat que se generó un recurso económico para lanzar un bono contribución. "Los clubes los venderán para cubrir el gasto extra que genera el aumento del servicio policial. Eso es lo que pudimos lograr", aseveró.
Y sostuvo: "Con estas medidas creo que alcanza para que comencemos a jugar el torneo, pero es la primera vez que se llega plantear si arrancamos o no. El año que viene,en caso de que este gobierno continúe, va a ser el certificado de defunción del fútbol del interior".