El sábado en la plaza 9 de Julio, de la ciudad de San Luis, un grupo de personas se reunieron para manifestarse en contra del proyecto de despenalización del aborto y en favor de "salvar las dos vidas". A la misma vez pero en la Plaza Pringles, pleno centro puntano, el "Festi Verde" apoyó la norma que se votará el 8 de agosto en la Cámara alta.
San Luis mostró las dos caras de la moneda en relación al aborto con dos festivales, uno de color verde y otro de color celeste. Ambas manifestaciones se expresaron con música, personas que argumentaron y sostuvieron sus posturas, unión, expectativa e incluso la participación de políticos, informó El Diario de la República.
Los de color celeste
Niños, padre, curas, jóvenes universitarios, médicos y organizaciones parroquiales coparon toda la superficie de la plaza 9 de Julio, del barrio Sosa Loyola. Los globos tenían los colores de la bandera. El frente de la Casa de Tucumán fue transformado en una especie de escarapela, que tenía un bebé en el centro.
María del Valle Chada, médica infectóloga, confesó al medio puntano que: "Si la ley se aprueba me negaría a hacer un aborto. Ni siquiera sé cómo realizarlo. Incluso tendrían que empezar a enseñar cómo se hace y me parece un error".
Durante el evento, algunos regalaban los pañuelos celestes y otros los vendían. También recordaban que aún quedaba lugar en el micro para viajar a Buenos Aires y apoyar la postura en contra del proyecto de ley.
Por su parte Fabricio Lord, un estudiante universitario, le comentó a El Diario que habría que buscar una solución para las mujeres que no desean ser madres, pero remarcó que el aborto no es una buena alternativa. Además resaltó: "El Estado tiene que intervenir y apoyar a todas las mujeres". El show "Provida" finalizó con la participación de Doña Jovita.
Los de color verde
En un escenario las conductoras del evento arengaban a todas las familias, alumnos y alumnas del secundario, de la universidad, artistas callejeros, madres con su niños y mascotas que concurrieron al microcentro puntano con que "el miércoles va a ser ley".
Lily Marini, representante de ADEM y una de las abanderadas de la lucha a favor del aborto en San Luis, manifestó que: "Esta lucha tiene muchos años. Las mujeres tenemos derecho a decidir con quién tener hijos, cuántos. Y si no queremos tenerlos, también tenemos derecho a decidirlo".
Una bandera verde de unos seis metros, colgada entre dos árboles, invitaba a pintar manos blancas sobre la tela. Los globos del color de la esperanza estaban agrupados de a tres y colgados en postes de luz, árboles y carteles fijos.
"No podemos permitir que una sola persona muera por un aborto clandestino. Hay que dejar de lado los números. La ley puede aprobarse o no, pero esta lucha igual sirve. Si no sale este año, será el otro. Y como dice Charly García: 'Los dinosaurios van a desaparecer'", dijo el médico Santiago Martínez, ante una platea que lo aplaudió.