El sistema de atención cardiovascular de Tucumán fue incluido por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en su Portal de Buenas Prácticas de Salud Pública, por su capacidad de reducir la mortalidad prehospitalaria y optimizar recursos a través de tecnologías móviles y protocolos de telemedicina.
Este reconocimiento internacional pone en valor una política pública iniciada en 2019 con la creación del Programa Provincial Red de Infarto, que logró acortar los tiempos de diagnóstico y tratamiento en casos de infarto agudo de miocardio, incluso en zonas alejadas, utilizando celulares y videollamadas para consultas médicas especializadas.
Una experiencia que nació de la evidencia
El sistema nació tras detectar que, en 2016, los tiempos de atención del infarto agudo con elevación del segmento ST (IAMCEST) eran excesivos debido a la falta de articulación en la red sanitaria. Una investigación multicéntrica desarrollada entre 2017 y 2018 probó que la transmisión de electrocardiogramas vía celular reducía significativamente los tiempos de atención, acelerando tanto el diagnóstico como el acceso a terapias de reperfusión.
A partir de esa experiencia se diseñó la Red de Infarto, con nodos de atención equipados con recursos de telemedicina, una coordinación cardiológica prehospitalaria y personal capacitado en guardias de emergencia. La herramienta se potenció con un sistema de videoconferencia sincrónica, lo que permite asistir de inmediato a pacientes con distintas patologías cardiovasculares.
Más allá del infarto: consultas ampliadas
Con el tiempo, la red comenzó a recibir consultas por otros cuadros: arritmias, síncope, insuficiencia cardíaca, hipertensión severa, disnea y dolor torácico, entre otros. Por eso, se amplió el alcance de la estrategia a todas las urgencias y emergencias cardiovasculares, integrando el sistema público con derivaciones al sector privado en caso de cobertura por obra social.
Resultados concretos que salvan vidas
Los indicadores del programa son contundentes:
- El 50% de las consultas pudo resolverse en el primer nivel de atención.
- De los casos derivados, el 80% con cobertura social fue atendido en el sistema privado, aliviando la carga sobre el sistema público.
- En los casos de IAMCEST, se redujeron los tiempos totales de isquemia, aumentó la tasa de trombólisis y la estrategia fármaco-invasiva, incluso en centros alejados.
- Se registró una reducción significativa de la mortalidad prehospitalaria.
Además, la informatización de las teleconsultas permitió monitorear calidad, trazabilidad y eficiencia, generando evidencia concreta sobre el impacto positivo de la red en toda la provincia.
Salud pública con equidad y eficiencia
El programa, coordinado por el Ministerio de Salud Pública de Tucumán, liderado por el doctor Luis Medina Ruiz, y en línea con las políticas sanitarias del gobernador Osvaldo Jaldo, demuestra que con planificación, tecnología e inversión sostenida, es posible garantizar una atención de calidad sin importar la distancia geográfica, cobertura social o nivel socioeconómico.
El reconocimiento de la OMS no solo valida el modelo tucumano, sino que lo convierte en referente internacional. En un contexto donde las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de muerte en el mundo —con más de 17,9 millones de fallecimientos anuales—, este tipo de políticas pueden marcar la diferencia entre la vida y la muerte.