El ministro de Salud de Tucumán, Luis Medina Ruiz, recibió este viernes al director del Centro de Referencia para Lactobacilos (CERELA-CONICET), Jean-Guy Joseph Leblanc, y a la investigadora Alejandra de Moreno, en una reunión clave para la reactivación de la Leche Bio, un alimento probiótico que revolucionó el tratamiento de patologías gastrointestinales infantiles en la provincia y que hoy se proyecta recuperar como política de salud pública.
Acompañado por los subsecretarios Marcelo Montoya y Cristina Majul, el ministro señaló que esta articulación se enmarca en una estrategia impulsada por el gobernador Osvaldo Jaldo, orientada a recuperar desarrollos científicos locales con impacto social. “Hemos tenido una reunión muy importante para reactivar un producto que fue orgullo tucumano: la Leche Bio, un desarrollo que combina ciencia, salud y compromiso con la comunidad”, expresó Medina Ruiz.
Un producto nacido de la ciencia tucumana
La Leche Bio fue desarrollada a partir de una investigación conjunta entre el CERELA y el Hospital del Niño Jesús. Se trata de un alimento funcional de alto valor sanitario, que demostró eficacia en la prevención y tratamiento de diarreas infantiles, así como en la protección de la flora intestinal en pacientes tratados con antibióticos.
Durante el encuentro se analizó la posibilidad de adaptar el producto a nuevos formatos como yogur Bio o queso Bio, sin perder sus propiedades probióticas. “Este fue el primer alimento probiótico desarrollado en Argentina, y aunque hoy se fabrica en más de 60 países, paradójicamente no se produce en el país debido a cuestiones legales y de patente”, explicó Leblanc.
En ese sentido, uno de los principales desafíos será avanzar en gestiones legales para que el sistema científico local pueda recuperar el uso de la fórmula. Medina Ruiz anticipó que ya se iniciaron los contactos pertinentes para destrabar esta situación.
Producción local y proyección social
La reactivación del producto incluiría producción con leche de la cuenca de Trancas, lo que permitirá vincular el desarrollo científico con la producción local. “Queremos devolverle a la sociedad un conocimiento que nació en Tucumán, con el potencial de mejorar la calidad de vida de miles de niños”, afirmó Leblanc, quien también destacó que el CERELA cumplirá 50 años en 2026, y reflotar la Leche Bio sería un homenaje a su historia.