Fue una madrugada violenta en el Hospital de Salvador Mazza. Un hombre ingresó a la guardia para atenderse por un resfrío y terminó atrincherado a los tiros dentro de una habitación de nosocomio. Terminó detenido.
El episodio que alteró a empleados y pacientes se desató alrededor de las dos de la madrugada. Un hombre de entre 45 y 50 años llegó al Hospital en busca de atención por un resfrío. A los pocos minutos enloqueció, sacó un arma tumbera y comenzó a disparar dentro del lugar.
Luego se atrincheró en una de las dependencias del edificio mientras los enfermeros llamaban a la Policía. Se puso en marcha un enorme dispositivo de seguridad con efectivos de la comisaría local, de la unidad regional y de Infantería. Pasadas las cinco de la madrugada, y después de tirar gases lacrimógenos desde donde estaba encerrado, el hombre fue detenido.