"Se acabó esta pesadilla." Así se expresó Claudia Suárez Eguez, oriunda de Bolivia, luego de que la Justicia la dejara en libertad. La mujer pasó un año presa en el penal de General Güemes, en Salta, luego de involucrarse con el narcotráfico e intentar pasar cocaína al país.
Claudia explicó que la apremiante necesidad económica surgida a partir del diagnóstico de cáncer de su hijo Fernando, de 13 años, la impulsó a cometer el delito por el cual estaba presa en la provincia de Salta.
La historia se hizo conocida luego de que Infobae publicara la situación de la mujer, y la Justicia le otorgara permiso humanitario para viajar a su hogar en Bolivia a despedirse de su hijo enfermo. El niño finalmente falleció a los cuatro días de llegar su mamá.
"Estoy feliz, recién me avisaron y mi hija Mía me abrazó y me preguntó por qué lloraba, si tenía que volver a allá, pero le dije que no, que ya no voy a volver, y nos abrazamos. Estoy muy contenta porque se acabó esta pesadilla", dijo la mujer, quien se encuentra en su hogar en Monteros, Bolivia.
El juez federal Ernesto Hansen firmó el fallo que absuelve a Claudia siendo que a mediados de noviembre, el fiscal federal Federico Zulueta levantó la acusación en contra de la mujer. El fiscal argumentó que tras conocerse el calvario que sufrieron la mujer y su hijo, ya no quedaban argumentos para imputarle el delito de transporte de drogas, ya que la intención del mismo había sido evitar un mal mayor.
"Mi vida desde que llegué acá fue feliz, porque estoy con mis hijas, aunque ya no lo tengo a Fernando, aquí lo sobrellevo, y lo recuerdo a él todos los días. Pero estoy feliz y contenta con mis hijas", contó Claudia luego de enterarse de su sobreseimiento.
