Adriana es salteña y en plena cuarentena se convirtió en mamá de cuatrillizos, después de perder dos embarazos. Los pequeños nacieron en el Hospital Sardá de Buenos Aires luego de que en Salta le dijeran que no podían internarla porque tenía el documento vencido.
La historia de Adriana es sinónimo de lucha y de fe. La joven mamá del municipio salteño de Salvador Mazza contó que cuando tenía 15 años pensaron que tenía cáncer pero finalmente confirmó que tenía purpura, una enfermedad que una enfermedad en la que el propio sistema inmunológico destruye las plaquetas de la sangre. "Me recomendaron no quedar embarazada", recordó en un video realizado por Hernán Churba y difundido por el Hospital Sardá.
Años más tarde conoció a su pareja, Ulises, y decidió que quería ser mamá, que iba a intentarlo. En el camino perdió dos bebés hasta que finalmente quedó embarazada de los cuatrillizos. "El médico que me atendió en la frontera, en Bolivia, me dijo que debería elegir a tres bebés y hacer fallecer a uno. Le dije que no, que si tenían que nacer tenían que nacer los cuatro", destacó.
En Salta estuvo internada una semana y no pudieron continuar suministrando la medicación porque tenía el DNI vencido. Cuando llegó a Buenos Aires junto a su mamá, luego de un largo viaje, tuvieron que dormir en un refugio porque no tenían dinero hasta que fue internada en el Hospital Sardá donde el 7 de mayo le hicieron la cesárea el 7 de mayo. "Me internaron inmediatamente. Empezó la cuarentena y solo podía ver a mi mamá media hora y mi pareja no estaba aquí", señala Adriana.
Ahora el sueño de la joven mamá es poder regresar a Salta junto a Zoe, Jasiel, Adriel y Ulises para encontrarse con su familia: el papá de sus hijos, su mamá, papá y hermanas para estar todos juntos.