Policías de la comisaría del municipio salteño de Joaquín V. González clausuraron una fiesta que no tenía habilitación, y donde además había bebidas alcohólicas y menores de edad.
Sucedió esta mañana en un local comercial ubicado en el centro de la ciudad. Había alrededor de 150 personas, entre ellos menores de edad. Al llegar al lugar, la policía entrevistó a la encargada, quien no tenía autorización municipal para hacer la fiesta.
Tras la clausura, los menores fueron trasladados a la dependencia policial donde llamaron a sus padres para que los retiren. Se labró el acta de infracción y secuestro de bebidas alcohólicas.