El último fin de semana desenterraron los cuerpos de dos bebas en Cañada de Gómez. La fiscal a cargo de la causa presume eran gemelas y este martes esperaba los resultados de la autopsia ante la hipótesis de que la mujer detenida por el episodio se sometió a un aborto.
El hallazgo de los restos humanos a casi 60 kilómetros de Rosario tuvo enorme repercusión este lunes. El operativo iniciado la noche del domingo en Bolívar al 900 demandó el rastrillaje de un área de 70 metros cuadrados en la vivienda de un vecino de la madre.
La fiscal Gabriel Lescano estimó que la mujer de 39 años cursaba las últimas semanas de gestación. En cuanto a la causa penal, recordó que sólo puede ser imputada por homicidio si nacieron con vida.
Como primer paso para esclerecer el episodio, la policía comprobó que la madre había cursado un embarazo. Una vez que le brindaron asistencia médica, empezó la búsqueda de los cuerpos enterrados en un patio de Cañada de Gómez.
La casa donde encontraron los restos de las bebas pertenece a un vecino. En diálogo con Radio 2, la funcionaria del Ministerio Público de la Acusación (MPA) apuntó que la madre “iba comúnmente”. Dentro de la investigación establecieron que tiene otros hijos, aunque sólo uno de ellos quedó bajo el cuidado de su papá.
¿Cómo descubrieron las bebas enterradas en Cañada de Gómez?
La investigación en Cañada de Gómez partió de una serie de fotos “dos neonatos o fetos” y un mensaje de voz que advertía sobre un aborto en una vivienda de la zona. La fiscal consideró que la evidencia era verosímil y pidió el allanamiento en el que también arrestaron a un hombre cuya identidad se mantuvo bajo reserva.
El operativo comenzó a las 22 y terminó a las 2.30 de la mañana del lunes en la cabecera del departamento Iriondo. Los cuerpos fueron enviados al Instituto Médico Legal (IML) de Rosario para realizar la autopsia y otros peritajes.
En cuanto a la situación de la madre, Lescano apuntó que fue “difícil contenerla” mientras la policía y los bomberos revisaban el lugar. En vísperas de la audiencia imputativa, reconoció que todavía no pudo definir la calificación legal y espera el resultado del análisis forense.
Si se comprueba que la mujer detenida consintió un aborto después de la semana 14 de gestación, puede recibir una pena de entre 3 meses y un año de prisión. Sin embargo, la condena puede dejarse de lado “cuando las circunstancias hicieren excusable la conducta”. En el artículo 86 del Código Penal se establecen dos excepciones a la sanción que pueden correr para este caso: si el embarazo fue producto de una violación o si está en riesgo la vida o la salud integral de la persona gestante.