“¡Mami, mami, me dispararon!”, gritó Paola este miércoles a la noche mientras entraba corriendo hacia su casa. A la joven embarazada la balearon en la zona sudoeste de Rosario y tuvieron que operarla después de un ataque por razones que la familia ignora.
La muchacha de 22 años estaba por cenar hacia las 23.30, cuando escuchó que alguien llamaba desde la calle con palmas. Ni bien se asomó, sintió el ruido de los fogonazos e ingresó asustada por el dolor que sentía en el abdomen.
La balacera ocurrió sobre Comandos 602 al 4200 y dejó a la familia en estado de shock. Marisol vio a su hija tirada en el piso y salió a pedir ayuda desesperada. En un reportaje con Canal 3, contó que su hermano alzó a la joven y poco después consiguieron que los llevaran en auto al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca).
A la joven de 22 años le dispararon tres veces y un proyectil ingresó en su abdomen. Una vez que la atendieron en la guardia, los médicos decidieron operarla. En el quirófano trataron múltiples lesiones del colon y consiguieron estabilizarla.
El director del Heca, Jorge Bitar, confirmó este jueves que Paola está “muy bien” después de la cirugía. En primera instancia decidieron trasladarla a una sala general de cuidados intermedios, donde permanecía sin asistencia respiratoria.
En el posoperatorio, la muchacha no presentó complicaciones. Los médicos estimaron que lleva 13 semanas de embarazo y sólo faltaba una ecografía para descartar problemas en el proceso de gestación por la herida que sufrió.