La Secretaría de Control y Convivencia confirmó que este fin de semana hubo 66 vehículos secuestrados durante los operativos de tránsito que se llevaron a cabo entre la noche del jueves y la madrugada del domingo.
Fuentes oficiales detallaron que cuatro de los rodados corresponden a personas que dieron positivo el test de alcoholemia: tres habían consumido cannabis y una cocaína.
Por otra parte, las autoridades informaron que 35 de los vehículos remitidos al corralón municipal son de conductores que tenían niveles de alcohol por encima del máximo permitido. El registro más alto en esa lista de infractores fue de 2,25 gramos por litro de sangre y se detectó el viernes a la noche.