El Servicio Penitenciario provincial responsabilizó a la Justicia por el crimen de Rubén Ariel "Tubi" Segovia en la cárcel de Coronda, al asegurar que en más de una ocasión había advertido que este interno debía estar alojado en un pabellón de máxima seguridad.
"El 9 de febrero planteamos que debía estar en un sector de resguardo para cuidar mejor su integridad física y la de otras personas, pero el 14 de marzo la Justicia ordenó trasladarlo a una cárcel común, con medidas de control mucho más limitadas", manifestó Lucía Masneri, directora de Relaciones Institucionales del Servicio Penitenciario.
En una conferencia de prensa realizada tras conocerse la noticia del crimen de uno de los líderes del clan Caminos, la funcionaria no confirmó que se trató de un asesinato, aunque dio indicios en ese sentido.
"A las 16:25 entró la guardia por un foco ígneo en el mismo sector y lo ven a Segovia con un cable en el cuello, heridas de arma blanca y golpes en el cuerpo", sostuvo y agregó que ahora deberán peritarse las cámaras de videovilancia, las cuales habrían filmado a tres o cuatro hombres ingresando a la celda de Tuby y atacándolo por la espalda.
Contrario a lo que se creía inicialmente, estas personas no serían miembros del clan Funes, enemistado con los Caminos, sino que pertenecerían a su círculo de confianza. "Cuando pidió el traslado, Segovia firmó que no tenía problemas con nadie del pabellón", destacó Masneri y añadió que a partir de la decisión judicial "que se entrometió", cualquier interno "podría haber ingresado sin problemas a la celda del fallecido".
Quien también le pegó a los magistrados fue el ministro de Seguridad, Maximiliano Pullaro. "Con frecuencia la Justicia nos ata de pies y manos y nos saca a pelear al ring", disparó en diálogo con Canal 3 y agregó que tiempo atrás, una medida judicial complicó seriamente las requisas.
"Nosotros les damos a los internos cuatro comidas diarias y la Justicia decidió que igualmente los familiares puedan hacerles ingresar 20 kilos de comida, convirtiendo una requisa de 40 minutos en una de seis o siete horas", cuestionó.