Novedad Mega Botau nació en Guinea Ecuatorial hace 24 años y juega profesionalmente al fútbol. Un día conoció a la hinchada de Central y desde entonces se hizo fanal del canalla. De hecho logró contagiar a sus compañeras de equipo, que ahora juegan con la casaca auriazul, y no se pierde un solo partido del equipo, al que sigue por internet.
La República de Guinea Ecuatorial es un pequeño país, cuya capital es la ciudad de Malabo, y que se ubica al sur de Camerún. De allí es "Nove", una jugadora con sangre canalla. "Me fascina mucho Central, tiene aficionados tan locos que daría lo que sea por vivir un partido de Central en casa y sentir esa energía que transmite esa afición", dijo la jugadora al sitio oficial de Rosario Central.
"Desde que conocí a Central, no me pierdo ningún partido por internet. Tengo la gran ilusión de que antes de morir tengo que ver un partido de Central en la cancha. Ese es el sueño que tengo que cumplir", indicó.
Al equipo lo seguía por la web, pero le faltaba una camiseta. "Un día que fui al 'Rastro' (mercado de puestos desmontables), y vi que vendían camisas de todos los países). Ahí vi la de Rosario Central y me la compré", dijo.
A partir de ahí comenzó a contagiar a sus amigas. "Les dije a mis compañeras de fútbol sala, que teníamos que elegir ese modelo de camisa. Fue así que Aurora, mi equipo, jugó hace dos temporadas con la camisa de Central".
Por su buen juego, un buscador de talentos la llevó a jugar al Candela, equipo que milita en la Segunda División del fútbol español. En su segunda temporada se llevó el premio a la mejor jugadora de la liga y también se consagró como "Pichichi" (máxima goleadora) de la temporada.
Tras esa campaña, Nove llegó al C. D. Ofra, de la ciudad de Tenerife, que tiempo después le permitió jugar con la selección de Guinea Ecuatorial.