Después de dar un paso al costado como jefe regional en el Ministerio Público de la Acusación (MPA), Patricio Serjal envió este lunes su renuncia como fiscal de grado. Por la tarde, el gobernador Omar Perotti firmó el decreto que dispuso su salida definitiva ante las denuncias por corrupción a partir de una investigación sobre extorsiones, ataques a mano armada y juego clandestino.
Voceros del organismo judicial informaron que esta segunda presentación quedó a disposición del fiscal general de Santa Fe, Jorge Baclini, quien la remitió a su vez a la Casa Gris. Luego del primer pedido público del Ejecutivo para concretar el desplazamiento, el secretario de Justicia provincial, Gabriel Somaglia, le confirmó a Radio 2 la firma del decreto correspondiente.
Más temprano, colegas del sampedrino criticaron duramente su gestión a tono con los términos del comunicado que publicó la asociación que representa a funcionarios del MPA. En el texto se cuestionaba que la primera renuncia sólo se refería al cargo regional, por lo que dejaba abierta la puerta para que volviera a ocupar otro puesto dentro del organismo.
La situación de Serjal será motivo de una reunión de la comisión bicameral de Acuerdos de la Legislatura santafesina este martes a las 18. Diputados y senadores tratarán además el caso del fiscal de Flagrancia, Gustavo Ponce Asahad, señalado como cómplice de su jefe en maniobras para cobrarle coimas a un empresario dedicado a los juegos de azar.