El día después del tiroteo que puso en peligro la vida de un policía rosarino baleado en la cabeza, la Justicia provincial planteó este miércoles que la principal hipótesis en torno al hecho se refiere a un intento de robo a otro agente de civil en Nuevo Alberdi.
Según el Ministerio Público de la Acusación (MPA), Víctor P. recibió un disparo en el cráneo en medio de la persecución que se inició sobre Vieytes y Joaquín Suárez, a metros del acceso a la Ruta Nacional 34. La víctima y su compañero llegaron hasta allí alertados por su colega, quien indicó que los ladrones iban en un Chevrolet Aveo.
El auto fue abandonado a unos tres kilómetros del sitio donde los tiradores iniciaron la huida. Adentro secuestraron un fusil FAL, el cual será peritado después del operativo que realizó la Agencia de Investigación Criminal (AIC).
El fiscal de Homicidios Dolosos, Miguel Moreno, recibió aviso sobre el episodio a partir de una llamada que ingresó al 911 pasadas las 21.40. En la zona entrevistaron a testigos presenciales para reconstruir la secuencia y establecieron que el oficial de 43 años iba manejando cuando fue alcanzado por los balazos de los delincuentes.
Tal como trascendió inicialmente, el MPA estima que había entre cuatro y cinco personas dentro del vehículo secuestrado. Ninguna de ellas fue identificada y se esperaba además el resultado del relevamiento de las cámaras de seguridad.