La Secretaría de Control y Convivencia confirmó este domingo dos nuevas clausuras por la cuarentena en Rosario. En uno de los casos se ordenó el cierre de una heladería céntrica en la que detectaron una infracción a las medidas sanitarias actuales para prevenir el contagio de coronavirus.
Si bien las directivas actuales no impiden la apertura de bares y otros locales gastronómicos en la ciudad, voceros de la cartera explicaron que el local de Avenida Pellegrini al 900 había puesto mesas y sillas en el interior. De esta manera se incumplió la orden de evitar la permanencia de los clientes para evitar la propagación de COVID-19.
El lugar está habilitado como bar americano sin elaboración y también tiene la posibilidad de enviar pedidos a domicilio. Debido a esta situación, durante la inspección encontraron a ocho personas sentadas -repartidores en su mayoría- y eso provocó la clausura por parte del municipio.
En paralelo con este procedimiento, la Municipalidad también dispuso el cierre de una fábrica de la zona sur que seguía activa a contramano de la normativa vigente. En este caso, los agentes de control pusieron la faja en un establecimiento de Barcarola al 5000 dedicado a elaborar productos de caucho. De esta manera se amplía la variedad de negocios que violaron la cuarentena e incluso se han verificado infracciones de este tipo en tiendas de cotillón.