Luego de que el Ministerio de Trabajo de Santa Fe dictara la conciliación obligatoria ante la emergencia sanitaria que detonó el brote de coronavirus en el país, el Sindicato de Trajadores Municipales inició este martes el paro provincial por 48 horas con una serie de medidas adecuadas a la epidemia.
Previo a los anuncios del domingo por parte del Gobierno nacional, el gremio local ya había ratificado el cese de actividades. Sin embargo, el secretario general Antonio Ratner confirmó que descartaron convocar a una protesta en la calle como parte del reclamo de actualización salarial ante el riesgo de propagación del COVID-19.
En paralelo con lo que ocurre en la ciudad, la Federación de Trabajadores Municipales ratificó que no habrá movilización en Santa Fe más allá de que decidieron sostener la medida de fuerza. La secretaria adjunta en Rosario, Yamile Baclini, argumentó alrespecto que el diálogo con el Ejecutivo "estuvo abierto de manera permanente" pero "no hubo ningún tipo de propuesta ni de acercamiento".
En el marco de las últimas directivas desde el Palacio de los Leones para limitar el riesgo de contagio en la administración pública y el sector privado, el sindicato garantizó guardias mínimas en salud y seguridad. A su vez, también decidió restringir la atención en sus propias dependencias, incluyendo el Centro de Capacitación y el Centro Médico.