Aunque la Justicia provincial ordenó mantener detenido a su padre bajo la sospecha de que abusó de ella, Natalí Aguirre reveló este miércoles que las amenazas de muerte siguieron hasta el día previo al arresto del hombre señalado como el papá y abuelo de sus cuatro hijos.
"Me dijo que estando preso podía mandar gente para matarme igual", afirmó la mujer de 32 años que este fin de semana decidió acudir a la policía tras la última violación en una saga macabra que comenzó cuando sólo era una niña. Después de más de dos décadas, el domingo a la noche le dijo la verdad a su madre y aclaró: "Ella no es cómplice, me apoyó cuando se lo conté".
En un reportaje con Telefe, Natalí afirmó que la exesposa de Hugo Víctor Aguirre "no estaba nunca" en su casa y "trabajaba todo el día", lo que le permitía al acusado sostener las mentiras que le hacía decir a su hija para justificar los cuatro partos que tuvo desde los 13 años.
Mientras su mamá la respaldó de inmediato a la par de Fátima (19), su hija mayor, Natalí señaló que ninguna de sus dos hermanas menores la apoyaron. Con dolor remarcó luego de la audiencia imputativa: "Hoy fueron a declarar en mi contra".
La mujer confirmó por otra parte que consiguió animarse a hacer la denuncia gracias a la intervención de una psicóloga. "Me ayudó la nieta de la señora que cuido. El lunes a las 5.30 me levanté y fui a Casilda", contó sobre el prólogo de la investigación a cargo del fiscal Juan Pablo Baños.
