Después de pasar casi dos meses presa a 250 kilómetros de sus tres hijos, una mujer imputada tras la muerte de su bebé prematuro en Arteaga podrá regresar a su hogar. Aunque la Justicia decidió morigerar la medida cautelar y otorgarle arresto domicilario, su defensa sigue cuestionando la acusación en una situación de vulnerabilidad.
La jueza Carolina Hernández dispuso este miércoles dar marcha atrás con la resolución de primera instancia que tomó su par Mariel Minetti en los Tribunales de Casilda. No obstante, ratificó la figura de homicidio por omisión calificado por el vínculo en relación al día en que Natalia fue internada luego de dar a luz en su casa.
La madre soltera de 32 años estaba detenida en la Cárcel de Mujeres de Santa Fe y su caso generó una fuerte crítica pública de Jaquelina Balangione, titular del Servicio Público Provincial de Defensa Penal. La exmagistrada subrayó entre otras cuestiones que la muchacha es el único sostén de sus tres hijos de 16, 14 y 8 años. Además se quejó de que fue citada a la audiencia de cámara por videoconferencia.
La investigación a cargo del fiscal Juan Pablo Baños busca esclarecer lo ocurrido la madrugada del 4 de agosto en la vivienda ubicada sobre Francia al 200 en el departamento Caseros. Allí la policía encontró un feto de 35 semanas de gestación. Según el Ministerio Público de la Acusación (MPA), el bebé nació vivo y su mamá solicitó ayuda a una tercera persona antes de ser trasladada al Samco local por una descompensación. De acuerdo a la prueba recabada por las autoridades, ella omitió avisarle a los médicos sobre el parto y así impidió darle asistencia médica y física al recién nacido.
Por su parte, Balangione exigió que Natalia continúe en libertad durante el proceso, ya que no existe peligro alguno de fuga. En este sentido argumentó la mujer trabaja como empleada municipal en un taller textil y no hay nadie más que pueda hacerse cargo de su familia.