Un control vehicular terminó con la detención de 17 jóvenes que se encontraban fraccionando estupefacientes para su comercialización. El operativo estuvo a cargo de Gendarmería que debió intervenir ante la agresión de vecinos cómplices de los delincuentes.
Todo ocurrió en la tarde de este jueves en Camilo Aldao y Segui. Efectivos federales estaban controlando los papeles de un automovilista, cuando un sujeto los vio e ingresó corriendo a un pasillo.
El movimiento llamó la atención de los gendarmes que intervinieron y se encontraron con 17 jóvenes, de entre 17 y 24 años, estirando droga y armando paquetes para su comercialización.
Pese a que intentaron fugarse por los techos, fueron capturados. Como rápidamente aparecieron familiares de los malvivientes intentando liberarlos, hubo que esperar la llegada de refuerzos para poder sacarlos y trasladarlos.
En el procedimiento se secuestraron, además de gran cantidad de droga que todavía no fue pesada, elementos de corte, una moto y una bicicleta.