La Asociación Civil Ferias Francas del Chaco se reunió ayer por primera vez para tratar la problemática de las sequías. Margarita Ibáñez, presidenta de la organización, señaló que “las lluvias de febrero no alcanzan” para aliviar la falta de irrigación, y que por esto se ven amenazados los cultivos y animales de los feriantes.
La reunión se realizó en carácter virtual con la participación de delegados de Campo Largo, Castelli, Corzula, General Pinedo, General Vedia, Laguna Limpia, Miraflores, Presidencia La Plaza, San Martín, Santa Silvina, Tres Isletas y Villa Ángela.
Son 20 las ferias del interior que están adheridas a la Asociación, haciendo a un total de 250 familias involucradas. Aparte de una venta semanal de productos, llevan a cabo fondos rotatorios de frascos, la elaboración de harina algarroba, capacitaciones, y gestiones múltiples.
Ibañez explicó que, durante la cuarentena, los feriantes continuaron con su trabajo y se adaptaron a la situación a través de ventas a domicilio y, recientemente, han regresado a los locales acatando a las medidas de prevención.
Respecto a la situación económica, la presidenta de la Asociación declaró: “Si bien los consumidores nos siguen apoyando, las ventas disminuyeron. A esto, se suma el encarecimiento de los alimentos para los animales y ahora, la falta de agua”.
En cuanto a cómo actuará a continuación el organismo, Ibañez aseguró que piensan buscar soluciones a los principales problemas de cada feria. “La idea es invitar a nuestra próxima reunión a funcionarios de organismos provinciales, como el Instituto de Desarrollo Rural, Agricultura Familiar y Economía Popular y la Secretaria de Agricultura Familiar Campesina e Indígena, para así presentar nuestros planteos y buscar soluciones conjuntas”, dijo.
