Una mañana ardua se vivió en Resistencia. Durante la segunda jornada en la que la capital del Chaco no tuvo recolección de residuos, el sindicato municipal que lidera el veterano dirigente Jacinto Sampayo, quien a viva voz (la asamblea se realizó en plena calle) trató de “puto de mierda” al intendente Jorge Capitanich para luego amenazar a todos los ciudadanos con que “haría reventar la ciudad”. Sin que se conozcan los pedidos formales, los municipales mantenían su segunda jornada de protesta.
Los audios y las imágenes de las amenazas de Sampayo se hicieron virales lo cual fue generando una indignación sin límites en toda la ciudad. Muchos vecinos reclamaron la actuación de oficio de fiscales o jueces para detener a un personaje que hasta hace poco estuvo detenido por una causa que sigue abierta en la Justicia Federal y en la cual está imputados (junto a la diputada nacional y ex intendenta Aida Ayala) de liderar una banda que generó malversación de fondos públicos y lavado de activos, entre otros delitos.
Cuando el clima de violencia fue creciendo, y tras una reunión con funcionarios del Ejecutivo municipal, Sampayo prosiguió con la asamblea y propuso levantar el paro y acatar la conciliación obligatoria dictada por la Dirección Provincial de Trabajo. Hasta ese momento, la propia Municipalidad había salido con un comunicado oficial pidiendo las disculpas a toda la comunidad porque “la continuidad del paro sigue afectado la prestación de los servicios municipales, especialmente al sistema de recolección de residuos”. Ahora se espera la reunión formal con las autoridades municipales en ejercicio, aunque la sensación de zozobra por las amenazas quedó instalada en la comunidad.