El programa Bicentenario de Inclusión Educativa (PBIE) es uno de los programas que forma parte del Departamento de Inclusión Educativa de la Secretaría de Educación del municipio.
Desde hace 14 años, el PBIE tiene como objetivo promover el acceso y reducir el abandono en la educación secundaria, brindando un apoyo integral a estudiantes de este nivel.
Con la certeza de que la educación es un pilar fundamental para el desarrollo tanto individual como colectivo, los centros de Inclusión Educativa desempeñan un papel vital en las trayectorias educativas, especialmente para aquellos estudiantes que se encuentran en situaciones de vulnerabilidad.
El programa cuenta con 5 centros ubicados en diferentes espacios de la ciudad, coordinados por una tutora, quien trabaja en estrecha colaboración con un equipo docente de las áreas básicas: sector Oeste, con sede en Federación de Vecinales del barrio Malvinas Argentinas; sector Villa Dominga, en la vecinal del barrio; sector Pileta, en la Pileta de la Granja “El Ceibo” del barrio Italia; Mora, en la vecinal del barrio; y el sector Sur, que funciona en el DIAT ubicado en el barrio 2 de Abril.
Una de las actividades a destacar es el trabajo en territorio que hace el programa durante todo el año. En el mes de febrero, se realizaron unas 300 visitas a los hogares de los estudiantes mientras se acompaña a estudiar a quienes siguen en proceso de aprobar materias anteriores.
Desde marzo a diciembre, el equipo de profesores recibe a diario y en ambos turnos a grupos de estudiantes. Y además, se articula continuamente con instituciones y organismos para brindar un acompañamiento integral y personalizado a cada beneficiario.
En los informes recientes sobre el primer cuatrimestre educativo, se registraron un total de 362 jóvenes que asisten a los centros, incluyendo a aquellos que ingresaron este año como a quienes han estado participando desde años anteriores.
Casi el 60% de los estudiantes que participan del PBIE lo hace de manera regular, mientras que el resto lo hace para realizar consultas y/o durante las instancias de exámenes.
Los centros del PBIE y los más de 3.000 adolescentes que los transitaron en estos años, confirman la necesidad de contar con espacios educativos inclusivos y de calidad, que proporcionen acompañamiento en el aprendizaje con un enfoque personalizado y que garanticen la igualdad de oportunidades en la educación.