En las últimas 48 horas, se ha desatado un fuerte conflicto entre la Municipalidad de Rafaela y uno de los 41 barrios de la ciudad: el Mora. Reuniones y comunicados se hicieron públicos y ahora será el momento de acercar posiciones.
El sábado por la mañana, y con carácter de urgente, se realizó una reunión a la que estaban invitados el intendente, concejales, seguridad, obra pública e infraestructura, vivienda y urbanismo.
Los reclamos eran varios: la falta de un destacamento policial en el lugar, la falta de conexión con el barrio San José y la falta de patrullaje. Pero no solo era algo vinculado a la seguridad: también la rotura de bolsas de residuos, la aparición de microbasurales y la falta de un SAMCo, entre otros puntos.
Al encuentro solo fueron 4 concejales (Juan Senn, Valeria Soltermam, Lisandro Marsico y Carla Boidi) pero ninguno de los funcionarios del Ejecutivo. Claramente, esto no gustó: “si no nos dan una respuesta para fin de mes, vamos a tener que ir con bombos al Municipio”, dijeron en aquella reunión del sábado por la mañana.
Ante esta situación, comenzaron las cartas abiertas y los comunicados. El primero, fue del del barrio Mora, el cual transcribimos a continuación:
“Ante la reiterados hechos de inseguridad que tenemos en el barrio, convocamos de manera urgente una reunión con las autoridades locales.
Lamentablemente *NADIE DEL MUNICIPIO SE HIZO PRESENTE*, solo asistieron los concejales Juan Senn, Valeria Soltermam, Lisandro Marsico y Carla Boidi.
Queríamos repuestas por parte del Intendente, queríamos que nos diga que plan de prevención de delitos tiene pensando para nosotros, pero nada de eso ocurrió. Fue una falta de respeto a los más de 50 vecinos que asistimos a la reunión.
Sabemos que la municipalidad tiene plata. Así como son tan rápidos para aumentar un 300% los impuestos, deberían serlo para darnos respuestas.
Hasta ahora solo vimos que lo poco que la municipalidad hacía en el barrio, lo dejó de hacer, el intendente Viotti nos abandonó. De todas formas desde esta comisión vamos a seguir luchando.
El único que se comunicó con nosotros fue el Fiscal Regional Carlos Vottero, con quién vamos a tener una reunión el día martes. A la misma le vamos a llevar todos los hechos que cada uno de ustedes nos hicieron llegar.
No puede ser que en un barrio de gente trabajadora esté pasando esto. Vamos a seguir insistiendo para que nos cambien el horario de la recolección de residuos, nos mejoren la iluminación, que tengamos mayor recorrida de la GUR, que vuelvan los talleres y programas como antes, que tengamos mayor cantidad de cupos para el camión atmosférico, más cámaras, etc etc.
Vecinos, sepan que no están solos. Tenemos que estar más unidos que nunca.
En nombre de toda la comisión vecinal, los saluda Maximiliano Orellana, Presidente”.
Después llegó la respuesta del intendente. Primero, Viotti eligió las redes sociales. Pero también brindó una entrevista a Bien Despiertos, en donde dijo que hubo una “actitud prepotente” por parte de la vecinal, al querer obligar a ir a funcionarios al encuentro. “Las reuniones nosotros las consensuamos”, dijo. “No nos pueden amenazar con una marcha”, sentenció.
También mencionó que una cuadra de pavimento, en la actualidad, sale 60 millones de pesos. Lo que implicaría que, para poder llevar adelante el plan de pavimento aprobado por el Concejo Municipal, en promedio, un vecino debería pagar 36 cuotas mensuales de 100.000 pesos. Seguramente, impagable para más de uno.
En aquella carta abierta en las redes sociales, se indicó que era para “aclarar algunas inquietudes y malentendidos”,
“Todas las reuniones solicitadas por los vecinos se gestionan y coordinan a través del equipo de Vecinales, que trabaja junto a las 41 vecinales de la ciudad para resolver las diferentes situaciones que se presentan”, sentenció Viotti.
“Sobre la reunión en Barrio Mora, el equipo de Vecinales intentó comunicarse en varias oportunidades sin éxito. Recordamos que las reniones deben realizarse por consenso, no por imposición”, concluyó.
Todo hace suponer que esto es un primer paso de un largo camino entre ambas partes.