Los puntaltenses se movilizaron desde diferentes barrios de la ciudad para disfrutar todos juntos un partido trascendental de la Selección Argentina, que logró la gloria y se consagró campeón del mundo tras vencer a Francia por penales.
Punta Alta explotó de alegría en zona céntrica, en Irigoyen y 25 de Mayo, entre cantos, banderas y una emoción que se reflejaba en cada sonrisa. Tuvieron que pasar 36 años para volver a ser Campeones del Mundo.